Más de 150 millones de personas están habilitadas para ejercer su derecho al voto en Brasil, en una primera vuelta que está pautada para el domingo 2 de octubre, en la que buscará la reelección el actual mandatario, Jair Bolsonaro o regresar al poder el izquierdista, Lula Da Silva.
Algunos brasileños dan por hecho que el vencedor de estos comicios será el expresidente Lula, quien es uno de los favorecidos en las últimas encuestas.
La agudización de la economía, el aumento de la gasolina, los altos costos de alimentos y las cifras de la pandemia en la nación, inciden en la gestión de Bolsonaro, y en el malestar de la ciudadanía.
Con respecto a la intención de voto, los brasileños están dispuestos acudir a las urnas electorales, pero otros sectores abstencionistas no quieren tener participación en el proceso electoral, y pagar la multa correspondiente de esta acción