Este miércoles, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional de España confirmó la condena por agresión sexual contra Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), por el beso no consentido a la futbolista Jenni Hermoso durante la ceremonia de la Copa del Mundo en Sídney, el 20 de agosto de 2023. La sentencia mantiene la multa de 10.800 euros y la prohibición de acercarse o contactar a Hermoso durante un año, impuesta en febrero por un tribunal de primera instancia.
El tribunal calificó los hechos como agresión sexual, rechazando la apelación de Rubiales, quien argumentó que el beso carecía de “connotación sexual”. La Audiencia Nacional determinó que “un beso en los labios en esas circunstancias refleja una clara connotación sexual” y no puede considerarse “frecuente, usual ni habitual”. La defensa de Rubiales anunció que recurrirá al Tribunal Supremo, insistiendo en su inocencia.
La Fiscalía, que inicialmente solicitó dos años y medio de prisión, y Jenni Hermoso, que apeló la absolución de Rubiales y otros tres exdirectivos de la RFEF por coacciones, también vieron desestimados sus recursos. El tribunal explicó que no puede revisar una absolución sin causas de nulidad y descartó un nuevo juicio por supuesta parcialidad del magistrado.
El incidente, que se viralizó y generó indignación mundial, llevó a la renuncia de Rubiales en septiembre de 2023 tras una suspensión de la FIFA y presiones para dimitir. El caso, enmarcado en una reforma del Código Penal español que clasifica un beso no consentido como agresión sexual, se convirtió en un símbolo del movimiento #SeAcabó contra el sexismo en el deporte. Además, Rubiales enfrenta investigaciones por presunta corrupción y contratos irregulares en la RFEF.
